123 gr de emociones.

Hubiese sido mejor dejarlo pasar.Tenía los nervios a flor de piel y ya no podía hacer nada para evitarlo. Las cosas ahora no marchaban tan bien como antes , ella estaba rodeada de problemas sumándosele todavía el estar arruinada a causa de la bancarrota.Las desgracias le ocurrían una tras otra , parecía que iban seguidas y cuando estaba acabando una parece que ya podía presentir el principio de la siguiente.
En realidad era extraño el porqué de esas circunstancias pero encontraba motivos en las peripecias que pudiese haber hecho en su otra vida.
Con todo y con eso no conseguía nada llorando por todas las esquinas, necesitaba algo que volviese a darle ánimo , a concederle de nuevo su grato aspecto , su belleza efímera junto con su buen carácter. Anhelaba la vida que antes tenía ya que  todas las cosas las fue perdiendo por su ambición. Estaba cegada por el dinero pues en el mundo para ella no existía otra cosa.El cariño y el amor no significaban nada sino estaban ligados a hombres ricos y poderosos.Ella al fin y al cabo era diferente a las demás mujeres puesto que en su época y en la sociedad en la que vivía no estaba bien visto aferrarse tanto al dinero y sobreexponerlo por encima de todo.
Una buena cura de humildad no le hubiera venido nada mal , pero todas las tontas tienen suerte y la verdad a ella nunca le faltó. Fue admirada y reconocida por todos , envidiada como la que más pero de que le servía si carecía de lo más importante.. de corazón. Un corazón verdadero y puro de los pocos que pudieran existir ; a ella le faltaba .. no le conmovía nada ni siquiera pasar por la calle y ver a esos niños con ropajes pidiendo limosna para comprarse el pan de todos los días al ser lo más barato que podían llevarse a la boca , no se emocionaba al ver a la gente enferma postrada en una cama incluso sabiendo que algunos pasarían en ella el resto de su vida. Ella no era de las que tenían lágrima fácil y su alma tampoco estaba limpia .
Ahora echaba la vista atrás y se daba cuenta del daño que había causado y de lo cruel que había sido pero ya no podía reemplazarlo . Lo único que podía hacer además de lamentarse era conseguir emociones , poder llorar de alegría y no solo de tristeza , intentar no centrárse en ella misma ni darle ese valor tan significativo que le daba a aquellas monedas que para ella eran lo más importante . Podría recopilarlas en una caja y contarlas por gramos hasta así llenar la caja y tener la certeza de que si algún día perdiese esas emociones tan solo tendría que abrir la caja y volverlas a recordar .